Las partículas de contaminación de la ciudad pueden penetrar en la piel
Una de los principales problemas para la piel en la ciudad es la contaminación. Pequeñas partículas de polvo conocidas como PM 2.5 pueden atravesar la barrera protectora de la piel y causar estragos. Ellas desencadenan una reacción en cadena que comienza con la oxidación del sebo en la superficie de la piel, seguido por el aumento de la producción de grasa y la hiperqueratinización – más células muertas en la superficie. ¿Conclusión? Las espinillas se ven peor y pueden aparecer nuevos granitos.
Todos hablan del peligro de la contaminación, pero ¿qué tipo de cuidado diario ayuda a la piel a defenderse? Un buen lugar para comenzar son las texturas anti-adhesión que previenen que las partículas de contaminación se peguen a la piel y causen estragos.
La exposición al sol puede empeorar el acné
La luz UV es otro enemigo de la belleza (sí, ¡incluso un día soleado puede causar inconvenientes!). De hecho, un mito sobre el acné es que la luz del sol es el gran salvador para la piel propensa al acné. ¡Falso! En el corto plazo, un bronceado puede hacer que tu tez se vea más uniforme, pero el efecto de secado del sol hace que la piel quede más oleosa después de tus vacaciones. El aceite combinado con un espesamiento de la capa superior de la piel obstruye los poros y evita que el sebo salga correctamente.
¿Conclusión? El sol modifica el comportamiento de la piel, haciéndolo más propenso al acné. La piel necesita protección específica contra los rayos UV. ¿El primer paso? Protección UV de amplio espectro que cubra tanto UVA como UVB. Recomendá a tus clientes con esta patología protectores solares con texturas fluidas, no grasas y no comedogénicas.
El estrés agrava tez propensa al acné
Largas jornadas, exámenes, un entorno locamente competitivo… ¿Notaste alguna vez que tu tez tiende a sufrir cuando las cosas se ponen difíciles? No estás solo: la investigación científica ha demostrado un vínculo entre niveles altos de estrés y la severidad del acné. La verdad es que los médicos todavía no tienen del todo claro el efecto de estrés, pero se piensa que se trata de hormonas de estrés que causan que la glándula sebácea fabrique aceite extra, convirtiendo la piel en un caldo de cultivo para las imperfecciones.
¿Conclusión? No es tu imaginación: el estrés es un verdadero desencadenador del acné. Cuando se trata de estrés en la ciudad, cada persona tiene que encontrar su propia manera de mantener el centro, salir con los amigos, ir al gimnasio o simplemente alejarse de la tele. Siempre es aconsejable que te hagas un tiempo para vos mismo. ¡Tu piel podría agradecértelo!