En algunos casos los celíacos podrían sufrir dermatitis u otras complicaciones si algunos labiales, cremas corporales o shampoos penetraran por la boca, nariz o a través de pequeñas heridas.
El gluten figura en la lista de ingredientes de muchos productos cosméticos. No siempre de forma directa, pero sí bajo títulos como aceite de germen de trigo, almidón de trigo o proteína hidrolizada de trigo. También está en algunas vitaminas procedentes del trigo, la avena, la cebada, el centeno y en sus derivados directos como la malta.
La forma de asegurarnos que un cosmético sea libre de gluten es que posea en su envase el logo “sin TACC”. Como información adicional, el cosmético debe tener ciertos requisitos para estar a la venta. A saber: lote y vencimiento, número de registro del elaborador y dirección, número de resolución del Ministerio de Salud, entre otros.
En Argentina hay marcas de cosmética que están trabajando muy duro para lograr que sus productos sean aptos para celíacos, no solo en cremas sino también en esmaltes, lápices labiales, bálsamos, make up, shampúes, etc.
Además, es importante recomendar a la población celíaca que utilicen productos que no posean sustancias nocivas como ftalatos o derivados de grasa animal (podría haber gluten en esta materia prima). Tampoco derivados del petróleo (porque con el uso prolongado en el tiempo pueden traer sensibilidad en la piel).
Por ello, utilizar cosméticos 100% veganos es recomendable, siempre que no posean gluten.
La especialista Dorys Pérez Mautone brinda los siguientes datos que pueden ser de utilidad para las dermoconsejeras:
- ISDIN informa que sus cremas y lociones pueden ser usadas por celíacos sin problemas.
- La Roche-Posay afirma que todos sus productos son libres de gluten.
- Eucerin explica que sus líneas no contienen gluten, pero no pueden asegurar su absoluta ausencia. Sugieren consultar a un médico para un correcto asesoramiento. Lo mismo ocurre con los productos de Avène.
La Asociación Argentina de Celiaquía (www.celiaco.org.ar) tiene a disposición una guía impresa de cosméticos sin TACC que edita anualmente a partir de la información remitida por empresas y laboratorios. También solicita a la empresa el compromiso de informar si en el transcurso del año, el producto sufrió algún cambio en la composición que puede ser nocivo para el celíaco.
Es importante recordar que como dermoconsultoras, es necesario guardar todos los recaudos necesarios a la hora de recomendar o aplicar un producto.